Cuando se graba se dispone de una enorme y, a veces, abrumadora gama de micrófonos, configuraciones y técnicas. Resulta tentador pensar que “más es mejor”, es decir, más micrófonos, preamplificadores y pistas. Pero, en música especialmente, existe una belleza y libertad innegables cuando reduces tu proceso de grabación a lo esencial. 

 

Aunque a todos nos encanta tener un armario lleno de micrófonos, los resultados que se pueden obtener con un solo micrófono pueden ser sorprendentes. Ya sea capturando una fuente de sonido a la vez para un proyecto de múltiples pistas, un solista o un conjunto entero simultáneamente, crea una cierta magia sonora imposible de conseguir de otra manera. También agiliza el proceso de grabación, ya que permite centrarse más en el momento que en la parálisis que generan las opciones pendientes.

 

Así que, ¿puedes capturar una actuación musical realmente impresionante con un solo micrófono? Por supuesto y esto podría abrirte las puertas a un nuevo mundo de posibilidades creativas. Y ahora explico como se hace.

 

Hay muchas más razones para grabar con un solo micrófono, y todas ellas se basan en la visión artística, la comodidad y la facilidad. ¿Quieres los cálidos sonidos mezclados de forma natural de la década de 1950? ¿Quieres capturar una actuación llena de particularidades y que la grabación sea extraordinaria? Se puede trabajar desde un pequeño estudio en casa sin muchas opciones de equipo. Sea cual sea tu inspiración, aquí hay algunas de las ventajas que ofrece utilizar un solo micrófono para todo. 

 

Sencillez: 

Es extraño lo intimidante que puede ser decir adiós a las complejas configuraciones de micrófonos y a los enredos de cables. Pero, cuando tengas el micrófono, lo conectes al preamplificador y lo envíes al dispositivo de grabación, apreciarás todo el tiempo que te sobra para centrarte en lo que más importa: la música. 

 

Cohesión sonora: 

El uso de un solo micrófono ayuda a mantener una relación sonora natural entre las fuentes de sonido. En lugar de capturar por separado piezas de un rompecabezas que luego tendrás que unir utilizando un plugin de reverberación y técnicas de mezcla, obtendrás una mezcla bellamente cohesionada que suena bien siempre.

 

Creatividad que fomenta la innovación: 

La necesidad es la madre de los inventos y las limitaciones de un único micrófono lo demuestran. Estas configuraciones pueden ser inspiradoras y conducir a técnicas de grabación no convencionales con resultados inesperadamente positivos. Acepta estas limitaciones; encontrarás un terreno fértil para la exploración sonora.

 

Enfoque hacia el rendimiento: 

Todos somos culpables de perdernos entre las innumerables herramientas y opciones digitales que tenemos a nuestra disposición. Limitarte a un solo micrófono te obliga a priorizar la interpretación y el arreglo de la canción. Llama tu atención de forma natural hacia el corazón y el alma de la música, eliminando los obstáculos de unos ajustes infinitos.

 

Cada micrófono tiene características que deben tenerse en cuenta al elegir esta opción. También existen algunos términos clave que debes comprender para sacar el máximo partido a una solución de un solo micrófono. Por ello, hay que tener en cuenta estos factores antes de empezar:

 

Todo gira en torno a la aplicación: 

En primer lugar, hay que preguntarse: “¿Qué voy a grabar?” ¿Es una sola guitarra acústica y una voz íntima? Es posible que esté trabajando con una potente sección de viento funk. Dependiendo de los micrófonos y las técnicas, la respuesta será distinta para cada aplicación. Definir los requisitos de la aplicación es la clave para obtener la mejor grabación con un solo micrófono. 

 

Tipos de micrófonos: 

Una vez definidas las necesidades de la aplicación, lo siguiente es elegir el micrófono adecuado. Los versátiles condensadores de gran diafragma suelen ser una buena apuesta, ya que ofrecen un amplio rango de frecuencias y un sonido pulido que se puede afinar en la mezcla. Los micrófonos dinámicos son caballos de batalla resistentes para fuentes ruidosas que es necesario recortar. Por otro lado, los micrófonos de cinta aportan una calidez natural con un toque vintage. En la siguiente sección se proporciona más información sobre los tipos de micrófono.

 

El efecto de proximidad aumenta las frecuencias de los graves a medida que se acerca el micrófono a la fuente de sonido. Aunque puede tener un mal rap, también es una potente herramienta para calentar rápidamente una fuente que suene más débil. Pero hay que tener cuidado. Si se acerca demasiado, se puede acabar con unos graves “woofy”, especialmente con los micrófonos de cinta. Un poco más adelante profundizaremos en la colocación del micrófono.

 

Patrones de polaridad: 

¿Tiene tu micrófono un patrón cardioide fijo? ¿Es omnidireccional? ¿Ofrece tal vez varias opciones? Saber hacia dónde está escuchando tu micrófono y dónde está ignorando sonido es esencial para encontrar el lugar adecuado para grabar. Un patrón omnidireccional puede hacer magia para capturar todo un espacio. Por otra parte, un micrófono cardioide o con patrón de figura 8 conmutable ofrece mayor flexibilidad a la hora de colocarlo.

 

Aunque todos los micrófonos son diferentes, suelen existir semejanzas entre los distintos tipos. Los tres tipos principales son los micrófonos dinámicos, los micrófonos de cinta y los micrófonos de condensador. Profundizaremos un poco más en cada uno de ellos como ayuda para elegir el adecuado para la cadena de señales de un solo micrófono.

 

Los micrófonos dinámicos suelen ser diseños pasivos que no requieren fuentes de alimentación externas. Su circuito relativamente sencillo contribuye a que sean resistentes y estén listos para usarlos sobre el escenario. También tienden a ofrecer un sonido enfocado en los medios que ayuda a las fuentes de sonido a abrirse paso en mezclas más sonoras y complejas. Por este motivo, es posible que los dinámicos no sean la opción preferida para grabar todo con un solo micrófono. ¡Pero no hay que tener miedo a experimentar!

 

Los micrófonos de condensador suelen tener circuitos activos, que reciben alimentación de una fuente externa, como una interfaz de audio equipada con alimentación Phantom de 48 V, una consola de mezclas o un preamplificador de micrófono. Esta potencia ayuda al condensador a capturar un amplio rango de frecuencias que puede hacer destacar ciertas frecuencias de formas extremadamente útiles. Los micrófonos de condensador son excelentes soluciones de un solo micrófono cuando se desea un sonido claro y pulido con articulación y peso adicionales.

 

Para este artículo, clasificaremos los micrófonos de cinta en las categorías vintage y moderna. Los micrófonos de cinta más antiguos suelen ser pasivos y requieren preamplificadores especializados para lograr un rendimiento óptimo. Sin embargo, los modernos son activos y ofrecen su famosa calidez con mucho menos esfuerzo. Esta calidez crea un sonido natural, situando al oyente en la sala con la actuación. El estándar de la industria hasta la década de 1970, los micrófonos de cinta pueden aportar un toque vintage a cualquier pista.

 

Cuando se visita un estudio y se ve un micrófono de condensador o de cinta que parece alargado, probablemente se trate de un micrófono estéreo. Al combinar dos elementos de un micrófono en una sola carcasa, estos micrófonos pueden capturar un amplio espectro estéreo sin necesidad de micrófonos adicionales.  

 

 

 

El micrófono adecuado para cada caso depende de lo que se intente lograr. Las diferentes configuraciones de un solo micrófono presentan diferentes requisitos. ¿Se va a grabar un solo o a una banda entera? ¿Se va a grabar un álbum o una retransmisión en directo? ¿Se busca un sonido seco o con mucho carácter ambiental? Veamos algunas aplicaciones típicas y comentemos sus mejores prácticas.

 

Grabación de solos: 

Un único micrófono de cinta o de condensador será perfecto en este entorno, especialmente si se trata de voces y una guitarra acústica. Hay que situar el micrófono con cuidado para lograr un buen equilibrio y adoptar la mezcla íntima y orgánica de ambos. Un micrófono de condensador aportará claridad y un rango de frecuencias más amplio, mientras que uno de cinta ofrecerá un extremo superior desarrollado que aportará a la grabación esa “sensación de estar en la sala”.

 

Vídeos de actuaciones en vivo: 

Aunque sea difícil de creer, un solo micrófono puede ser fantástico para capturar la energía bruta y la belleza de una actuación en vivo. Sin duda, se querrá empezar con una mezcla discreta, manteniendo los volúmenes bajos y dando prioridad a los matices sobre la potencia. Después, con un posicionamiento cuidadoso, es posible mejorar las actuaciones que se deseen y rechazar al mismo tiempo cualquier interferencia o “bleed”. Si se mantiene el control de los niveles y se presta atención a los problemas de feedback, todo debería ir bien.

 

¿Es posible grabar una banda entera con un solo micrófono? ¿Y un cuarteto de cuerda? ¿Incluso una sección de viento? ¡Por supuesto! Si se busca una estética tonal de la vieja escuela, un solo micrófono es una gran opción. También es la forma perfecta de garantizar una representación auténtica de la actuación. Sugerimos usar un micrófono omnidireccional. Colocar cada fuente de sonido estratégicamente en la sala permite obtener una mezcla inspiradora sin tocar un fader. 

 

 

 

Una vez elegido el micrófono, llega el momento de aprender a posicionarlo para obtener los mejores resultados. Gracias al patrón de polaridad del micrófono, la reacción al efecto de proximidad y la respuesta de frecuencia natural, unos pequeños ajustes en su posicionamiento pueden producir resultados muy diferentes. Es como aprovechar un ecualizador externo, un plugin de reverberación y tener el control dinámico simplemente moviendo el micrófono de un lugar a otro.  

 

Distancia desde la fuente: 

Cuando el micrófono está más lejos de la fuente, se empieza a captar más el sonido ambiente de la sala. Conforme se vaya acercando, aumentará el enfoque y los detalles con una característica de sonido “in your face”. El efecto de proximidad también desempeña un papel importante aquí, aumentando las frecuencias bajas a medida que se acerca.

 

Altura y distancia desde superficies: 

La posición del micrófono en relación con otras superficies, como el suelo o el techo, afecta a la cantidad de reflexiones sonoras y al “low end”. En términos generales, colocar los micrófonos más cerca del suelo resulta en un sonido más lleno y “retumbante”, mientras que si se colocan en el centro de una sala estas frecuencias destacadas se reducen.

 

Ángulo en relación con la fuente: 

La mayoría de la gente orienta el micrófono directamente a la fuente de sonido y ya está. Es una muy buena manera de hacer las cosas. Pero al inclinar el micrófono ligeramente fuera del eje, es posible suavizar sutilmente frecuencias específicas y reducir estridencias. 

 

Teniendo en cuenta toda esta información, es hora de empezar a grabar. Estas son algunas fuentes de sonido familiares con consejos y trucos para capturar sus mejores atributos con un solo micrófono. Se trata solo de recomendaciones. Nunca hay que tener miedo a experimentar para encontrar el sonido que se desea. ¡El proceso es lo mejor de todo!

 

Voces principales: 

Para lograr una grabación de voz natural y equilibrada hay que elegir un micrófono con una respuesta de frecuencia suave. Una opción clásica es un micrófono de condensador de gran diafragma con un toque de calidez. Se puede experimentar con el efecto de proximidad para obtener mayor profundidad.

 

Instrumentos acústicos y de viento madera: 

Un micrófono de condensador de gran diafragma también constituye un buen punto de partida para instrumentos acústicos con muchos detalles. Hay que considerar si el timbre del instrumento es cálido o brillante, y elegir el micrófono en consecuencia. Los micrófonos de cinta también destacan aquí, ya que proporcionan un tono bonito, amaderado y equilibrado.

 

Baterías: 

Los micrófonos de cinta y de condensador, especialmente los que tienen un patrón de polaridad de figura 8, pueden hacer maravillas como soluciones de un solo micrófono para baterías. Incluso es posible usar un verdadero micrófono estéreo para obtener una imagen sonora súper amplia. Lo importante es experimentar, ya que se querrá asegurar un equilibrio suficiente de los golpes de los bajos y la percusión capturando al mismo tiempo los detalles del “top end” de los platos. 

 

Amplificadores de guitarra eléctrica y viento: 

Un micrófono dinámico, como el Sennheiser e609, e906 o el legendario MD 421, es siempre una opción fiable para instrumentos con un sonido agresivo que hay que recortar. Pero si se trata de aplicaciones de un solo micrófono, hay que alejar el micrófono y optar por algo que abra más el sonido. Quizás experimentar con micrófonos de condensador y de cinta aporte una imagen sonora más detallada a las pistas. 

 

 

 

 

Reducir la grabación a un solo micrófono es un gran cambio de perspectiva. Aunque puede que no sustituya a la grabación multipista convencional para todas las situaciones, se trata de una herramienta increíble para capturar energía bruta, lograr un sonido cohesionado o simplemente encontrar inspiración sonora fuera de los métodos habituales. Lejos de ser un handicap, puede inspirar un mundo de nuevas técnicas de microfonía e ideas de arreglos, ofreciendo al mismo tiempo una mezcla poderosa y cautivadora.